Completas adviento

 

COMPLETAS

adviento-navidad-epifanía

Adviento - Navidad - Epifanía
El Adviento marca el inicio del año cristiano. Son los cuatro domingos anteriores a la Navidad y forma una unidad con la Navidad y la Epifanía. Después de la preparación de 4 semanas del Adviento, celebramos el tiempo de la Navidad, desde la víspera, 24 de diciembre, hasta el domingo siguiente y después hasta al 6 de enero en el que festejamos la Epifanía. Este Laudate especial del 2024/2025 es desde el domingo 1 de diciembre hasta el 6 de enero.

Tiempo con Dios

SALMO 42:8

 "De noche su cántico estará conmigo, y mi oración al Dios de mi vida"

SALMO 92:2

"Anunciar por la mañana tu misericordia, y tu fidelidad cada noche"

COMPLETAS

 Es la oración final de la "Liturgia de las Horas" de la Iglesia.

 

Antes de dormir Completas

Tiene el carácter de preparar el alma para su pasaje a la vida eterna, como un ensayo diario de la propia muerte.
Cipriano escribió en el año 258 d.C.: "Al ponerse el sol y terminar el día, de nuevo es necesario orar. Puesto que Cristo es el sol indeclinable y el día verdadero, al faltarnos la luz y el día naturales, oramos y pedimos que de nuevo la luz venga sobre nosotros. En realidad, pedimos que venga Cristo, portador de la luz eterna" ("De Oratione Dominica". 34).

La oscuridad de la noche simboliza la muerte, el poder de las tinieblas y del diablo, que "anda alrededor buscando a quién devorar" (1 Pedro 5:9). Por eso nos acogemos al amparo del Altísimo y a la protección de Dios (Salmo 91). Y hacemos nuestras las palabras finales de Jesús en la Cruz: "Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu" (Lucas 23:46); y las últimas palabras de la Hora piden que "el Señor todopoderoso y misericordioso nos conceda una noche tranquila y una muerte santa".




Adviento-Navidad-Epifanía

Liturgia 1

**Elegir alguna canción de adoración.

**Leer los escritos de los primeros tres siglos en Calendario en Completas Lecturas.

**Oración missional en Calendario.

**Una de las dos oraciones debajo.

Liturgia 2

**Elegir alguna canción de adoración. (

**Leer los escritos de los primeros tres siglos en Calendario en Completas Lecturas.

**Oración missional en Calendario.

**Una de las dos oraciones debajo.

Defensor Omnipotente

“'Se anticiparon mis ojos a las vigilias de la noche' (Salmo 119:148), 'oye mi voz conforme a tu misericordia' (Salmo 119:149). Dios todopoderoso, que eres sin principio, el único dueño de todas las cosas, que por Jesucristo nos has dado el conocimiento de tu gloria y de tu nombre, mira a tu Iglesia, a este rebaño que te está consagrado, líbranos de toda mala obra, que te temamos y te amemos. Oye nuestras oraciones, haz que permanezcamos en el bien.


Dios, tú que 'no escatimaste ni a tu propio Hijo, sino que lo entregaste por todos nosotros, ¿cómo no nos darás también con él todas las cosas?' (Romanos 8:32). Te ruego junto a mis hermanos, que manifiestes tu poder a favor de (nombre del país por el que oramos en esta semana). Por favor Señor, trae luz a cada pueblo de esa nación en oscuridad y engaño. Que el evangelio de Cristo corra por todo el país sin que nadie lo pueda detener (2 Tesalonicenses 3:1). Tu Hijo nos enseñó que antes de su regreso ‘será predicado el evangelio del reino en todo el mundo’ (Mateo 24:14). Clamamos para que cada habitante de (nombre del país por el que oramos en esta semana) pueda oír de Jesús. Trae salvación, te lo suplicamos. Que esta nación bendiga tu nombre (Salmo 113:2). '¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?' (Romanos 8:31).


Tú eres el defensor omnipotente, socorre a tu pueblo que has rescatado con la preciosa sangre de tu Cristo, sé nuestro protector y sustento, porque toda nuestra esperanza está en ti y nadie podrá arrebatar de tu mano lo que tú custodias. ‘Sustenta mis pasos en tus caminos, para que mis pies no resbalen. Inclina a mí tu oído. Tú que salvas a los que se refugian a tu diestra’ (Salmo 17:5-7). Santifícanos en la verdad, líbranos de todo mal y enfermedad, de todo pecado, y de los engaños del enemigo, de sus dardos que lance durante el día (Efesios 6:16) y todo intento de afectar nuestros sueños en la noche.

Haznos dignos de alcanzar la resurrección de entre los muertos y la vida eterna en Jesucristo, tu único Hijo, Dios y Salvador nuestro (Lucas 21:36; 20:35). ‘Estaré satisfecho cuando despierte a tu semejanza’ (Salmo 17:15). Amén".

Dios, Padre de gloria

“Dios, ‘Padre de gloria’, ‘mi pronto auxilio’ (Salmo 46:1), alumbra los ojos de mi entendimiento, lléname del conocimiento de tu voluntad en toda sabiduría e inteligencia espiritual, para que ande como es digno de Jesucristo nuestro Señor, agradándote en todo, llevando fruto en toda buena obra, y creciendo en el conocimiento de ti; fortalecido con la supereminente grandeza de tu poder, conforme a la potencia de tu gloria, el mismo poder que operó en Cristo, resucitándole de los muertos y sentándole a tu diestra en los lugares celestiales; para que mi adoración no sea según mi imaginación sino según deslumbras mi mente y corazón al revelarte a mí como eres tú, y para toda paciencia y longanimidad. Clamo para que mi alma esté llena de gozo viviendo en acciones de gracias por haberme hecho apto para participar de las riquezas de la gloria de la herencia de los santos en luz (Colosenses 1:9-12; Efesios 1:17-20).


Dios, fortaleza mía, en ti confiaré (Salmo 18:12), te ruego junto a mis hermanos, que manifiestes tu misericordia a (nombre del país por el que oramos en esta semana). Por favor ‘Padre de misericordias’ (2 Corintios 1:3), trae luz a cada pueblo de esa nación en oscuridad y engaño. Que el evangelio de Cristo corra por todo el país sin que nadie lo pueda detener (2 Tesalonicenses 3:1). Tu Hijo nos enseñó que antes de su regreso ‘será predicado el evangelio del reino en todo el mundo’ (Mateo 24:14). 

Pon tu gracia y poder en la obra misionera de ese país (Hechos 6:8), suple todas sus necesidades. Y guarda para vida eterna a los que ya son salvos. Que nuestros hermanos puedan reunirse a darte culto cada semana. Que tu Iglesia avance Dios. ‘Que los pueblos te alaben Dios, que todos los pueblos te alaben' (Salmo 67:3).


Te ruego, líbrame del pecado en mis sueños y de toda obra mala, y pon tu paz en mis sueños en esta noche. Sea yo eternamente para ti. Y bendice también a mi familia y a mis hermanos en Cristo con los que me has unido profundamente en un mismo Espíritu, bautismo, amor y misión. Prepara nuestro devoción para el oficio divino de mañana.

‘Al Rey de los siglos, inmortal, invisible, al único y sabio Dios, sea honor y gloria por los siglos de los siglos’ (1 Timoteo 1:17).

Por Jesucristo nuestro Señor. Amén”.

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